Han sido 4 horas de misa en la
plaza Jackson, entre el sol y la humedad creía que me iba a dar algo. Era un
evento especial, las 3 iglesias presbiterianas de Koforidua se reunían para
celebrar la misa juntas. Música, fiesta y colorido, pero claro 100% Twi, cuatro
horas sin entender lo que se dice llegan a aburrir por mucho que disfrute
viendo las costumbres locales. Tenía, sed, hambre y sueño. Llevo mi vestido
africano de los domingos ¡qué calor que da!
En los momentos de rezo aprovecho
para hacer mi propia reflexión, pero claro, resulta difícil cuando ellos rezan
murmurando, apretando los puños y contoneándose, parecen estar echándole la
bronca del siglo al de allá arriba, amenazándole. Y luego la histeria
colectiva, con pañuelos blancos en la mano y al ritmo de la música la plaza se
llena de gente para hacer las ofrendas.
Es un día importante, hasta el
chief de Koforidua está presente. Preside la bandera de Ghana con las 3
banderas que representan a cada una de las iglesias presbiterianas. Los niños y
la banda de música marchan al principio y al final (a los niños se les enseña a
marchar ya en el cole desde bien pequeños).
Entiendo poco pero respeto lo que
hacen, el año pasado ya aprendí a seguir el cantoral en Twi, así que al menos
puedo cantar (sin saber lo que estoy diciendo claro). Me parece una mezcla
entre una misa, un evento militar y un mitin político.
Al volver a casa nos hemos encontrado con que habían
cortado el agua otra vez, así que jabón y cubo de nuevo. Después ha venido
Jaume un rato, seguido del fufu de domingo (con pescado, prefiero el de pollo
mil veces) y otro domingo que se va, lo acabaremos viendo la tele en familia y
pronto a la cama que mañana subo al bus escolar a las 6,30
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